¡Es urgente coordinar y extender la lucha! ¡A romper el aislamiento, ya!
Ya desde hace días el depravado gobernador Ulises Ruiz había solicitado a Calderón el apoyo de centenares de elementos de la PFP.
La resultante: decenas de heridos y detenidos tanto de policías como de activistas de la APPO, este es el saldo tras 4 horas de violentos choques perpetrados por la violencia del Estado. El enfrentamiento estalló tras el intento de los más de 20 mil camaradas manifestantes de la APPO de tomar el auditorio del Cerro del Fortín, donde pretendían realizar una fiesta alterna denominada "Guelaguetza popular" para ayer y, adelantarse a la ceremonia oficial prevista entre el 23 y 30 de julio. Este nuevo choque entre las clases refleja que la energía revolucionaria de las masas oaxaqueñas sigue ardiendo como una llama que marca el camino a seguir.
Hace unos minutos, antes del cierre de este artículo, el portavoz de la APPO, Florentino López, informó que los profesores se concentrarán de forma masiva a partir del 21 de julio hasta el 30 para lograr el boicot a la Guelaguetza, que es una festividad en la que representantes de las 16 etnias del estado muestran sus costumbres y tradiciones en un auditorio que se localiza en el cerro del Fortín, al norte de la ciudad. Hace un año, esta fiesta fue cancelada por el boicot de la APPO como parte de las presiones para exigir la renuncia del gobernador oaxaqueño, Ulises Ruiz. A un año, la fuerza del movimiento ratifica su fortaleza, su convicción de llegar hasta el final. El violento desenlace de hace unos meses, que la burguesía anunció como una "victoria rotunda", no sepultó al movimiento, ni lo condenó a la derrota. A pesar del episodio que terminó aparentemente en una derrota parcial, en realidad fue una victoria moral de las masas oaxaqueñas, pues demostraron que "sí se puede" combatir al Estado capitalista y esa victoria moral quedó demostrada el pasado 2 de mayo en la jornada nacional de lucha contra los ataques al sistema de pensiones del ISSSTE, en que la APPO tuvo la fuerza de paralizar totalmente a la ciudad de Oaxaca, tan es así que nuevamente asistimos a una ofensiva de la burguesía.
El 29 de octubre de 2006 Militante escribió: "Seis horas de batalla campal costó a la PFP tomar la plaza principal de Oaxaca, miles de personas defendieron las posiciones de la APPO. Las fotos dan muestra de un escenario de guerra; mientras tanto en la Ciudad de México se llevaron a cabo manifestaciones de repudio por la represión a la APPO. Los empresarios, la Iglesia católica, la prensa burguesa, todos a una sola voz, elevaron su pletórico apoyo -lleno de gozo- a la intervención de la PFP ordenada por Vicente Fox. Pero, ¿qué va a pasar en los próximos días? ¿Todo volverá a la normalidad? ¿Los combativos luchadores de la APPO se regresarán derrotados a sus casas? Lo dudamos mucho. Marx explicó que en ocasiones la revolución necesita del látigo de la contrarrevolución y es precisamente a eso a lo que asistiremos, esta derrota puede ser sólo temporal ..." y más adelante: "La intervención de la PFP sólo demuestra la debilidad del régimen. Demuestra precisamente el callejón sin salida del capitalismo mexicano. Hicieran lo que hicieran, hagan lo que hagan, estará mal hecho para sus intereses de clase. ¿Creen que por haber retomado el zócalo oaxaqueño se han resuelto las cosas? ¡Qué equivocados están! Si la PFP abandona Oaxaca, la APPO volverá a tomar sus posiciones, ¿acaso mantendrán indefinidamente a la PFP en Oaxaca? Señores burgueses, reprimiendo a la APPO han cometido un craso error, prepárense a lamentar amargamente las consecuencias".
En realidad, la ofensiva de Ulises y Calderón obedece a una posición de debilidad del régimen. Cuando una bestia se ve hostigada, arrinconada, responde agresivamente; lejos de ser una posición de fuerza, este nuevo ataque es un indicador de la debilidad de la derecha. La única explicación por la que el régimen puede reprimir, la encontramos en la política colaboracionista de la dirección del PRD. ¡Es la hora de luchar, no de conciliar! La represión física es una alternativa que le queda al Estado burgués cuando los mecanismos de coerción ideológica han dejado de ser suficientes, esto es un indicador del avance de la lucha de clases y no de la fuerza del régimen.
El inspirador movimiento de la APPO en Oaxaca, es un pequeño indicador de la enorme energía revolucionaria de las masas mexicanas. A un año de los enormes acontecimientos, es necesario obtener las lecciones pertinentes. Es imprescindible coordinar y extender la lucha del pueblo oaxaqueño al conjunto del país. Tras esta nueva ofensiva represora, el paso obligado es trasladar lo más pronto posible el movimiento al Distrito Federal, hay que proteger al movimiento llevándolo al centro de la atención nacional, ¡hay que romper el aislamiento ya! Darle una connotación nacional de inmediato y no dejar que la represión se incremente por el aislamiento. La dirección de la APPO necesita una claridad táctica capaz de girar totalmente en menos de 24 horas, pero sobre todo, la dirección de la APPO tiene que dejar de una vez por todas, todo tipo de intento de conciliación con la burguesía, ¡está claro que a la actitud conciliatoria de la dirección de la APPO le ha correspondido la represión del Estado! Eso está mucho muy probado en el heroico movimiento de la APPO. Es necesaria una táctica clara que enfrente al Estado burgués coordinando y extendiendo la lucha a todos los rincones del país. En estos momentos, tras este nuevo ataque, más que la salida del reaccionario gobernador priista Ulises Ruiz, que más que una Asamblea Constituyente local, más que insistir en evitar la Guelaguetza oficial, hace falta llevar el movimiento hacia el conjunto del país, extender el movimiento a otros estados, empezando por las principales ciudades mexicanas, trasladando de inmediato el movimiento al DF y de ahí a los polos principales.
Las condiciones son favorables al movimiento por varias razones:
1.- El régimen de Calderón está a la baja, tanto por el comportamiento de la economía, como por la baja en su nivel de aceptación. Los principales indicadores económicos (petróleo, empleo, crecimiento, etc.) están colocando al gobierno Calderón en una situación de crisis cada vez mayor y eso se reflejará crudamente en la lucha por el próximo presupuesto de egresos en septiembre.
2.- El rotundo fracaso de Calderón en su aventura mediática en el terreno del supuesto enfrentamiento al narcotráfico, le ha obligado al régimen intentar distraer la atención montando o promoviendo los ataques del "terrorismo de Estado" a los oleoductos petroleros, para tener una "justificante" para salir del embrollo del supuesto combate al narcotráfico y para recrudecer las medidas represivas, preparándose para enfrentar un ascenso en la lucha de clases.
3.- Se ha destapado una cloaca putrefacta que, en cualquier país medianamente "democrático" de Europa occidental, habría causado serios conflictos a cualquier gobierno, nos referimos al caso Zhenli Ye Gon, un miembro de la mafia que financió la campaña del PAN a la presidencia que llevó fraudulentamente a Calderón a Los Pinos. Esta es una medida que debería lanzar a las calles a las masas de la CND, para derrocar a Calderón.
4.- Está en el horizonte una confrontación inevitable por la contra reforma al ISSSTE; eso sacará a las masas a las calles a luchar decididamente. Lo mismo el tema del intento que hará Calderón de privatizar el petróleo y la electricidad.
5.- Se aproxima también el intento de aplicar más ataques al pueblo trabajador a través de la reforma fiscal colocando más impuestos al pueblo trabajador.
6.- Con un llamamiento audaz de parte de la APPO hacia el conjunto del movimiento social, incluida la base militante del PRD y los sindicatos, especialmente al sindicato minero, incluyendo también al Consejo Nacional de Huelga (CNH), incluida la Convención Nacional Democrática (CND), se podría no sólo cobijar el movimiento de la APPO, no sólo se podría luchar rotundamente por la liberación de los presos políticos, no sólo los de la APPO, sino los de Atenco y por todos los presos políticos en general.
7.- La APPO puede trasladar un nutrido contingente al zócalo del Distrito Federal, y preparar comisiones que vayan al movimiento a agitar sobre la urgente necesidad de una huelga general de 24 por la caída, ya no de Ulises Ruiz, sino de Calderón, por le defensa de la seguridad social, por la democratización de los sindicatos, por la defensa del poder adquisitivo de los salarios, por la transformación socialista de la sociedad.
8.- Es mucho más valioso un combatiente de la APPO agitando por una política de masas en las asambleas a nivel nacional, que luchando heroicamente en Oaxaca aisladamente. Que el movimiento de la APPO no se convierta en un fin en sí mismo, sino que sirva para coordinar y extender la lucha hasta el último rincón del país. Los heroicos combatientes de la APPO pueden llevar estas propuestas a los sindicatos, a los grupos de base del PRD, a las comunidades regionales, vecinales, estudiantiles, etc.
Insistir en la idea de que las direcciones del PRD y los sindicatos están obligados a convocar a:
Una huelga general de 24 horas:
Conformar comités de huelga en todas las escuelas y centros de trabajo.
Estos comités deben realizar asambleas democráticas que determinen acciones coordinadas, manifestándose el mismo día a la misma hora y lanzando resoluciones firmadas por millones de trabajadores en repudio y por la caída del régimen de Calderón.
Conformar comisiones de finanzas y recaudación (boteos, venta materiales sobre la lucha de la APPO, etc.) de para dotar de resistencia económica al movimiento. Los trabajadores nos financiamos con nuestras propias fuerzas, porque "el que paga manda" y nos debemos única y exclusivamente a nuestra clase.
Deben hacer un llamamiento internacionalista para luchar contra el llamado "neoliberalismo" y en especial manifestar solidaridad internacionalista con los pueblos latinoamericanos en lucha, de los cuales sólo mencionamos a Venezuela, pues los ejemplos arrojarían una larga lista.
A conformar comisiones de prensa, propaganda y enlace.
Realizar acciones de protesta y bloqueos coordinados en los principales cruces carreteros y en las dependencias de gobierno.
Deben llamar a conformar poderosas comisiones de seguridad y autodefensa de las manifestaciones para evitar infiltrados provocadores.
¡Camaradas de la APPO! ¡Trabajadores de México, del campo y la ciudad!
¡Estas medidas no son medidas utópicas! ¡Todo lo contrario! Nuestra fuerza de clase, radica en nuestra cantidad y en que sin nuestro permiso no se mueve la sociedad. Sin el permiso de los trabajadores no se prende un foco, no da vuelta una rueda, no suena un teléfono, no se activa un cajero automático. ¡Tenemos la fuerza de millones y la capacidad de hacer funcionar la sociedad! ¡Usemos nuestra fuerza para asistir a los valientes combatientes de la APPO! ¡No permitamos que los hundan en sangre! La dirección de la APPO tiene que ser muy audaz para revertir la situación actual, con una táctica correcta, basada en métodos correctos y en una política de principios socialistas, es posible convertir en su contrario el ataque rompiendo urgentemente el aislamiento del movimiento. He aquí el punto clave de la táctica en estos momentos. Hay que convertir en su contrario a este ataque, que la revolución se vea impulsada por el látigo de la contra revolución.
¡No son las acciones aisladas sino la lucha de masas lo que derribará al gobierno y liberará a los presos políticos!
¡Alto inmediato a la represión en Oaxaca!
¡Inmediata caída de Ulises Ruiz!
¡Romper el aislamiento urgentemente, a coordinar y extender la lucha!
¡Golpeemos juntos el mismo día a la misma hora!
¡Trasladar el movimiento al D. F!
¡Todos a preparar una huelga general de 24 para derribar a Calderón!