Bolchevismo: el camino a la revolución, expone la historia del partido bolchevique que llevó a la clase trabajadora rusa al poder en 1917. Este libro escrito por Alan Woods, dirigente de la CMI y teórico marxista británico, es sobre todo un manual para la construcción del partido revolucionario en la actualidad que partiendo de la experiencia del bolchevismo, de la lucha para su construcción extrae las lecciones para la lucha de clases y la generación actual de revolucionarios. Una muestra de la valía es que su edición ha supuesto un referente político para los revolucionarios de todo el mundo.
El hecho de que el Presidente Chávez este leyendo en este momento decisivo de la revolución "Bolchevismo: el camino a la revolución" es una muestra de la búsqueda de ideas del Presidente para hacer avanzar la revolución al socialismo y de la autoridad de las ideas de la CMI. Chávez utilizó el libro de Alan para aleccionar a los dirigentes de PSUV varios aspectos.
En dos eventos realizados con motivo de las elecciones internas del PSUV para candidatos de Alcaldes y Gobernadores, el Presidente Chávez ante un auditorio de dirigentes nacionales del PSUV, señaló que estaba leyendo el libro de un amigo suyo, el teórico marxista británico Alan Woods y mostrando el libro Bolchevismo: el camino a la revolución leyó parte del libro en el evento que era retransmitido a nivel nacional en la televisión. Chávez tratando de trasmitir la idea de la importancia del partido revolucionario, de la construcción del PSUV a los dirigentes nacionales y regionales allí presentes y se baso en párrafos del libro de Alan Woods El primero fue la cita de Trotsky a comienzos del libro y le sirvió para reforzar la idea del carácter de la dirección que debida tener el PSUV.
"En el año 1917, Rusia pasaba por una crisis social muy grave. No obstante, sobre la base de todas las lecciones de la Historia, uno puede decir con certeza que de no haber sido por la existencia del Partido Bolchevique, la inmensurable energía revolucionaria de las masas se hubiera gastado infructuosamente en explosiones esporádicas y los grandes levantamientos hubieran concluido en la más dura dictadura contrarrevolucionaria. La lucha de clases es el principal motor de la historia. Necesita un programa correcto, un partido firme, una dirección valiente y de confianza -no héroes de salón y de frases parlamentarias, sino revolucionarios dispuestos a ir hasta el final-. Esta es la principal lección de la Revolución de Octubre" y recalco dirigiéndose a los dirigentes del PSUV allí presentes la parte que dice "Necesita un programa correcto, un partido firme, una dirección valiente y de confianza -no héroes de salón y de frases parlamentarias, sino revolucionarios dispuestos a ir hasta el final" y dijo que los dirigentes del PSUV deberían amoldarse a esto que señalaba Trotsky.
El sábado 31 en el último acto previo a la elección del día 1 también retransmitido por televisión volvió a citar el libro de Alan Woods en la parte del prologo. "La presencia de un partido revolucionario y una dirección revolucionaria no es menos decisiva en la lucha de clases que la calidad de un ejército y su cuartel general en las guerras entre las naciones. No se puede improvisar el partido revolucionario en vísperas de una lucha decisiva, de la misma forma que no se puede improvisar el cuartel general en vísperas de una guerra." Pareciéndole muy acertada la comparación entre el estado mayor de un ejército.
Esta es una muestra de la creciente influencia de las ideas de la Corriente Marxista Internacional en el seno del movimiento bolivariano. Anteriormente el presidente Chávez había mencionado a Alan Woods en referencia al libro Razón y Revolución.
La recomendación del libro por Chávez ocurre solo medio mes antes de una gira de actos públicos de Alan Woods en Venezuela planificados por la Corriente Marxista Revolucionaria. El teórico británico viene con motivo a la publicación de un nuevo libro suyo, "Reformismo o revolución - Marxismo y socialismo del siglo XXI". Este libro constituye una respuesta a las ideas de Heinz Dietrich cuyas propuestas para la revolución venezolana van en la dirección de una reconciliación con la oligarquía y sembrar confusión y el justificar las ideas reformistas acerca del socialismo del siglo XXI.